Las investigaciones sobre posibles actos de corrupción y mala gestión en el Hospital José Carrasco Arteaga, perteneciente al Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) en Cuenca, han dado un nuevo paso. La Fiscalía General del Estado ha solicitado al Servicio de Rentas Internas (SRI) realizar una serie de diligencias para determinar si las denuncias presentadas tienen fundamento. En un plazo de 15 días, se espera que el SRI entregue un informe detallado sobre las “operaciones inusuales e injustificadas” relacionadas con el Sindicato del IESS y la Cooperativa de Empleados y Trabajadores del Seguro Social (CETOSS) desde el año 2024.
El asambleísta Adrián Castro, uno de los principales impulsores de las investigaciones, ha expresado que esta acción es fundamental para esclarecer el origen de los bienes y propiedades adquiridos por ciertos funcionarios del hospital. “Con estas diligencias podremos rastrear cómo y de dónde surgieron los recursos para los negocios, edificios y otros lujos de aquellos que actuaban como si fueran los dueños del hospital”, afirmó Castro. El examen incluirá una revisión detallada de cuentas bancarias, clientes, proveedores y movimientos financieros que podrían arrojar luz sobre las irregularidades denunciadas.
El caso salió a la luz pública tras una denuncia de mala práctica médica ocurrida en julio de 2024. En ese incidente, una niña que ingresó al hospital para ser tratada por una fractura en la pierna izquierda fue sometida a una cirugía errónea en la pierna contraria. Este lamentable hecho desató una serie de investigaciones que han sacado a relucir otros problemas dentro del hospital, como convenios con proveedores únicos para la instalación de máquinas expendedoras, la falta de insumos médicos y personal técnico, y presuntos casos de tráfico de influencias en la adjudicación de contratos.
Uno de los puntos más críticos que ha salido a la luz es la posible implicación de Rosa Argudo, secretaria del Sindicato de Trabajadores del IESS, en estos manejos irregulares. Las sospechas apuntan a que Argudo podría estar vinculada a la adjudicación de contratos dentro del hospital, lo que ha generado un fuerte debate sobre la transparencia en la gestión de la casa de salud.
En respuesta a estas revelaciones, los cinco asambleístas de la provincia del Azuay han llamado a rendir cuentas a tres altos funcionarios del IESS. Esteban Villa, director provincial del IESS; Rosa Argudo, en su rol de secretaria del sindicato; y Héctor Martínez, gerente del Hospital José Carrasco Arteaga, deberán comparecer ante la Asamblea para explicar las irregularidades que se han reportado y las acciones que se están tomando para resolverlas.
La ciudadanía de Cuenca sigue con atención el desarrollo de este caso, que ha puesto en tela de juicio la gestión del sistema de salud pública en la región. Mientras avanzan las investigaciones, se espera que las autoridades competentes tomen medidas concretas para corregir los errores detectados y devolver la confianza en el sistema de salud a la población afectada