El Gobierno Provincial del Azuay ha activado una serie de iniciativas para mitigar los efectos de la prolongada sequía que afecta a la región, con especial atención en los sistemas de riego y programas de apoyo para los productores agrícolas que enfrentan pérdidas en sus cultivos. Estas acciones buscan garantizar el acceso al agua de riego y brindar asistencia a los agricultores más afectados por las adversidades climáticas.

Xavier Fernández de Córdova, quien dirige la Unidad de Riego del Gobierno Provincial, explicó que se están tomando medidas preventivas y correctivas para garantizar el abastecimiento de agua en las zonas más afectadas. Entre estas acciones, se destacan la captación de agua adicional y la conexión entre diferentes sistemas de riego para asegurar que los agricultores no se queden sin este recurso esencial. Fernández de Córdova subrayó que, hasta el momento, no se han recibido reportes críticos sobre falta de agua en los canales de riego, pero la institución está en alerta y preparada para intervenir en caso de que las condiciones empeoren.

Una de las estrategias más importantes para enfrentar la crisis es la modernización de los sistemas de riego en la provincia. Según Fernández de Córdova, el 60% de los 326 canales de riego que se han registrado en Azuay están a cielo abierto, lo que genera problemas de filtración y desperdicio de agua. La tecnificación de estos sistemas es una prioridad para garantizar un uso eficiente del recurso hídrico, sobre todo en épocas de escasez.

Por su parte, el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) ha puesto a disposición de los agricultores el programa “Campo Seguro”, que subvenciona hasta el 60% de las pérdidas de cultivos causadas por fenómenos climáticos, plagas o incendios forestales, siempre que los productores hayan asegurado previamente sus tierras. Roxana Torres, directora distrital del MAG en Azuay, lamentó que solo una pequeña porción de los cultivos en la provincia esté asegurada, lo que limita la capacidad de los agricultores para acceder a estos beneficios. Torres hizo un llamado a más productores para que se sumen al programa y destacó que los costos de aseguramiento varían según el tipo de cultivo y el tamaño del terreno.

Además, para aquellos agricultores que no han asegurado sus cultivos, el MAG ofrece alternativas de apoyo, como la entrega de kits agrícolas con insumos esenciales y la provisión de asistencia técnica. Estos programas están diseñados para brindar soluciones inmediatas a quienes han visto afectada su producción por la sequía u otros factores climáticos adversos.

Torres también subrayó la importancia de que los municipios colaboren en las tareas de conservación ambiental, especialmente en la reforestación de áreas que albergan fuentes de agua cruciales para la agricultura. Estos esfuerzos, indicó, deben ser parte de un enfoque integral que combine la reparación ambiental con el apoyo social y económico a los productores locales.

En resumen, el Gobierno Provincial del Azuay y el MAG están trabajando de manera conjunta para ofrecer soluciones a corto y largo plazo que permitan a los agricultores hacer frente a los retos que impone la sequía, mientras se fortalecen los sistemas de riego y se promueve la protección de los recursos hídricos para asegurar el futuro del sector agrícola en la región